viernes, 23 de febrero de 2024









Recuerdo escenas parecidas. Subidones de pastillas, que casí me llaven al mas allá dondé solo bailan los ángeles. Solo tenía 20 años , la ambulancia pasa pero no pasa por ti. Tirado como un perro en mitad de la calle. Fumaba base, así tengo la boca mezclada con coca, me puse también flamenco y minino. La heroina para nuestra genración era algo prohibodo, algo entre el sida y la muerte, que poca veces probamos, sino para vomitar una nube gris y un olvido. ERecuerdo una vez que ni los taxis de moncloa me querían coger, con el dinero en la mano y el bajon de las drgoas volviendo del cocoon.











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