martes, 30 de enero de 2024

Las esferas de poder y las bolas de Dragón.









Entre las - lejanas - "esferas de poder", que ya la política Española, parace una novela de ficción épica y cutre a la vez, elaborada por algún guionista de serie b entre la chapuza, y a estos muñecos , nuestros políticos, como en cualquier comedia, sabía Jacinto Benavente, los mueven cordelillos groseros en esta comedia divina o no. Ahora recuerdo una de las series que más me hizo reir cuando era joven, el enano rojo. Lo que me he réido con esta serie. El amor es el invento de los bancos para que nos arruinemos. DIce uno de sus personajes el holograma que lleva en la frente la H de holograma. Se empezó a emitir en 1988 , esto me recuerda a mi novela - 1989 - . Tengo que seguir escribiendo. Aunque llevo unas semanas parado. Un poco deprimido. Los años años 80`s sobretodo significaron el fin del viejo mundo, no por los franquistas y franco , sino el viejo mundo se acababa, poco a poco, llegaba el nacimiendo de internét, y la exploración del espacio. Mi generación la sennial una generación corta entre la X y los milenial, seremos los ùltimos en recordar como fué el mundo antes de internét. El viejo mundo , poco a poco murió, sin embargo fueron años muy bonitos para mi que era niño. Un día mi padre apareció con un ordenador era el año 1988, un amstrad 1512 con disquetera de 5 y 1/4 y poco a poco en los siguientes años llego ya internét y el futuro. Hacia finales de los años 80`s, España era un país que cambiaba , había ilusión social, se celebraban los grandes hitos que cambiaban el mundo, y poco llegó la modernidad, a mediados de los 90`s , los años de nuestras vidas, los 97, 98, 99. Para aquel trepidante cambio de milenio. A pesar de los psquiátricos posteriores de aquella época , pase una buena juventud, apenas sin medicación. Nadie miraba el movil en 1995, para aprender poco años : la llegada de internét y el comienzo de la exploracion del espacio. El siglo XXI acabará con todos nosotros. Nadie llegará vivo al siglo XXII y los pocos que lo hagan, hoy solo niños, un día verán cosas asombrosas, que nosotros nunca llegaremos a conocer. Vivir es igual para todos , tengo un bosquejo de novela, que empieza cuando una chica joven muere, y su alma trasciende a otro estado numinoso dónde no existe nada material, entonces allí al final de la novela , por un instante se pregunta de donde viene, y que fué la tierra, apenas la observa como un mundo imperfecto, como algo alejado, y remoto, en la gran obra de la creación. Y que una vez tuvo una hermana, y padres, que una vez estuvo viva, fué algo que casí había olvidado. Así que tengo muchas cosas que escribir. No paran de surgirme ideas, para nuevos proyectos. El amor es un invento de los políticos y los banquero para que nos arruienemos, y con ello nos arruienen la vida. Fuera de aquí , politícos hijos de puta, todavía me llamaban mafioso pero yo no trafico y vienen aqueí traficantes a llamarnos mafiosos. Que esos mafiosos, como yo soy escritor y poeta,y pintor apesar del silencio de los que se callan en este silencio de los corderos y las esferas de poder, dentro de poco Pedro sánzchez y Ayuso van a encontrar las bolas de Dragón y entonces ya la habremos cagado...


fdo: la mafia literaria de España.












A pesar de todo.



Después de tanto todo para nada. Escribió una vez el poeta José Hierro. También fue famoso por sus celebradas fiestas y amigos. A pesar de todo; la calamidad, de las nubes negras, la lluvia, las farolas amarillias, o mariano josé de larra, del desengaño, y todo aquello. Seguimos construyendo - el porvenir - . a pesar de los malos políticos, la vida buye.


domingo, 21 de enero de 2024










Yo hablo através de mi obra. No importa lo que digan los demás. Solo tengo que hacerme caso a mi mismo. Lo que importa es lo que yo hago, yo estoy escribiendo una novela sobre un barrio que alguna vez sifnifico algo más que ahora. En todo caso todo se renueva y pierde su sentido, cuando caén las décadas sobre el mismo paisaje donde sucede - 1989 - . Dejándome las tripas, a vena abierta en una novela de literatura - a bocajarro - para un mundo que lo que necesito es esto, buena literatura y no farsantes. Ya que la gente me - baile - . ¿QUién me baila...?




1989



alejandro r cisneros.


1.-la polilla, la hormiga, el ratón, la tela de araña.

"Al contemplar desde arriba podía imaginar larga hilera de viejos Olmos hasta la caída final y la vías del tren que cortan el paisaje que sigue descendiendo salpicado de casas y tejados rojos entre tilos, sauces y chopos blancos al lado de la avenida que cruza las vías. En las vías del tren ha habido muchos suicidios estudiantes y mendigos en una larga curva que proviene de la estación del Norte y Principe Pío, incluso pusieron vallas para evitar peligros y hace dos años pasado un chaval se ahorco en las vallas de seguridad. A veces llueve sin sentido. A veces íbamos a mirar la luna allí a las vías del tren, desde dónde se contemplaba la ciudad de Madrid a lo lejos : el piruli, la torre Picasso, las torres Kío desde una ventana a la ciudad que miraba hacia Aravaca, la avenida de la galaxia y su arboleda verde. Al entrar en la casa de Patrice el olor de la vieja vivienda medio abandonada me recordó a otra época dónde nosotros solo éramos niños y todo lo demás era campo. De repente al cruzar el umbral de aquella casa abandonada fue como volver a los años 80`s ; las viejas casas de este barrio estaban alquiladas a estudiantes de la universidad y había fiestas en las casas los fines de semana y se escuchaba a The Doors y Led Zepellin, los coches eran viejas furgonetas siata, cuatro latas, citroen, renault 5, los años 80`s se acababan en un lugar apartado y abandonado que no importaba a nadie a la afueras de una ciudad de Madrid. De golpe recordé nuestros viejos juegos de niños en la mina abandonada. "


    • ¡ Le he dado !.- Gritaba Jaime.
    • Yo creo que no. - Conteste.
    • Yo creo que si. - Gritaba Jaime mientras volvía a
    lanzar una piedra que caía contra el capo de coche.
    • ¡ Ahora si !- - Grito.
    
    

Al chocar la primera piedra contra el capó del coche a lo lejos las luces se encendieron y se escuchó al alguien gritar: ¡ Cabrones !. Nosotros corríamos desde la vieja mina abandonada hacia nuestras casas, solo corríamos y reíamos. Era el final del verano de 1989. Al mirar ahora los ojos viejos y cansados de patri caminando solo por la casa abandonada de sus padres, todo lleno de cosas tiradas por el suelo, papeles, viejos periódicos de otra época, revistas, ropa, discos de vinilo, recordé la primera vez que le vi, allí en el mismo lugar treinta años antes. Los años 80`s se habían acabado hacía mucho tiempo y nosotros ya éramos mayores pero en casa de Patrice todo recordaba a otra época porque aquél lugar había sobrevivido abandonado al paso del tiempo.



- Yo hablaba con tu padre. - Dijo el viejo patri.
- Si . - Conteste.


- Mira ven . - Dijo caminando por el pasillo hacia otra habitación.

Le seguí por el pasillo de la vieja casa llena de cosas por el suelo y con el perro gigante detrás de él hasta otra habitación. Al abrir la puerta un montón de cosa se cayeron de golpe hasta que esforzadamente patri consiguió abrir de par en par la puerta de la habitación. Allí tirado entre cajas tenía un viejo tocadiscos de alta fidelidad.


- Te lo regalo. - Dijo patri.
- Ni siquiera funciona. - Conteste yo.
- Hay que arreglarlo, lo iba a tirar, si lo quieres te lo quedas.
- ¿Que le pasa?. - Grite yo desde la habitación.
- Se para a la segunda canción.

Entre todas las cajas adiviné un montón de discos de vinilo. Empecé a enumerar algunos: el primer disco de bob dylan, la credence clearwater revival, the doors etc . Elegí un disco, lo saque de su funda, lo coloque en el plato y empezó a sonar y durante un instante volví a estar en los años 80`s hasta que el tocadiscos dejo de funcionar y todo volvió a quedarse completamente en silencio mientras el perro gigante me miraba y yo sentía que había rozado por un instante el reino de mi infancia.


- Tú padre era buen hombre. - Dijo patri.
- Si. - Dije yo cerrando los ojos.

Al final comprendes que no se puede volver; nadie puede parar el tiempo. Allí sentado en la cocina de Patri bebiendo cerveza empecé a recordar nombres de gente que hacía mucho tiempo que había olvidado sino pertenecía ya todo a un sueño que no se sabía si había sucedido en realidad.



- Han pasado treinta años. - Dije yo.
- Treinta años de todo. - Dijo Patri. - A finales de los 80´s yo tenía treinta y tantos
y tú solo eras un niño; te recuerdo bien, tú padre quería que estudiases.
- No lo hice- Conteste yo.
- Ya. - Dijo Patri mientras daba un sorbo a la lata de cerveza.

No sé que significa mirar la infancia cuando te haces mayor, tal vez no signifique nada o solo es un sentimiento de nostalgia. Sentados en la cocina veíamos como fuera seguía lloviendo con la puerta abierta de tal forma que el agua salpicaba dentro de la cocina, y llovía como si nunca fuera de dejar de llover cuando los días de lluvia se amontonan y se anegan las alcantarillas y todo se llena de charcos que arrastran las hojas secas del Otoño. Tampoco se que significa la nostalgia cuando el mundo nos deja solos o abandonados en una cocina hablando sobre cosas que sucedieron hace cuarenta años.


- ¿Como fué….?. - Pregunté.
- ¿El qué….?. - Pregunto patri.
- Ser joven en aquella época.
- Fue una locura. Todo estaba cambiando, incluso las drogas.
Recuerdo que fui el primero en traer tripis de la ciudad. 
Los llamábamos supermanes.
- ¿Los tripis?.
- Si , los tripis se llamaban superman: ajo, sello, micro-punto,
soles, o supermanes. - Eran viajes de ácido.
- Volvió a decir Patri.

- LSD. - Conteste yo.
- Si.
- Si te coge la risa, no paras. - Volvió a decir el patri.
- Los micro-puntos eran de colores. - Termino de decir y al final se calló.

Vine a vivir a este barrio en el año 1986. Antes vivía en la gran ciudad, en el barrio de Hortaleza. Un día de golpe me vi en el campo en mitad de ningún lugar a las afueras de la ciudad. Patri nació en París pero nada más nacer vino a vivir aquí a este barrio en el año 1967. Este barrio durante la posguerra había sido el barrio del carburo, que era el gas que utilizaban en las casas apenas sin acometidas de agua, más que los pozos que abundan en cada finca o tierra. No todo era feliz en 1989, apenas un verano antes el hermano de Javier, un obrero homosexual que alicataba suelos en el barrio se suicida cansado del mundo. Un año más tarde se ahorca en su local de materiales del pueblo el tito un hombre con un brazo deformado por la polio. En 1991 Carlos un chico con problemas de salud acelera el coche y se estampa contra una esquina. A veces llueve, eso es todo. La imagen de un hombre deteniendo los tanques en la plaza de Tiananmen recorre el mundo, la gente subida al muro de Berlín cambia el universo. 1989 pasará a la historia como el año cambió todo para siempre y nunca nos enseñaron que nunca podríamos volver. Allí solo había un paisaje abandonado, bosque y monte bajo, aldeas abandonadas , hornos de cerámica abandonados, almacenes abandonados, una antigua granja abandonada, una mina a cielo abierto abandonada, un estación de tren abandonada, un campo de tiro al plato abandonado, unos bunkers de la Guerra Civil abandonados , campos de fútbol abandonados y solo campo lleno de senderos y caminos que llevaban de un lugar a otro por donde ya solo los niños pisaban las tardes de verano cuando volvíamos de recoger renacuajos en el fondo de la mina abandonada y sus hondas charcas verdes que reflejaban el cielo. Solo el bosque era en si un reino majestuoso , oscuro y verde dónde de pequeño iba a coger piñas en el campo para prender la estufa de mi casa entonces de madera. La primavera un día de Mayo de 1989 , bajo la lluvia, unas katiuskas rojas , el prado iluminado recién florido entre oscuras zarzas y cañas tiernas. La caja de los gusanos de seda que un día serán mariposas, las hojas de morera, los viejos trenes pendulares cruzando el paisaje que salían de la estación del Norte y Principe Pío, el cielo borrascoso empujado por el viento justo antes de que nada pasara. en un lugar perdido que a nadie le importaba. Tal vez las raíces de los árboles hundidas en la tierra entre los charcos una mañana de Domingo azul y clara y no poder regresar aquél reino: - la polilla, la hormiga , el ratón, la tela de araña- .



2 . - Un lugar abandonado.

Alberto subió primero las escaleras que daban acceso a la segunda planta de la fábrica abandonada y a cada peldaño la escalera parecía que cedía. - Mirad he subido , no pasa nada – grito Alberto desde la planta de arriba. Luego subí yo y el leve peso de un niño apenas hizo moverse aquellas viejas escaleras. Luego subió Javier y al pisar el último peldaño cayó un poco de cal de la pared como si algo se hubiera movido.




- ¿Habéis visto como mola?.  - Expeto Alberto.
- No hay nada.  - Dije yo.
- ¿Y que esperabas encontrar?. - Dijo Javier.
-  ¡Eh mirad !. - Grito Alberto desde una esquina de la diáfana planta superior.
- ¿Qué es…?.  - Pregunté.
- Alguien se ha dejado aquí un radio casette. .- Dijo Javier.
- Si y hay botellas vacías y latas. - Contesto alberto.

Justo en ese momento la escalera cedió y cayó de un golpe retumbando con estrépito todas las paredes de la fábrica abandonada hasta luego quedarse otra vez todo en silencio. Alberto fue corriendo solo parar mirar las escaleras derrumbadas y javier dijo – Nos hemos quedado atrapados - . Al mirar por las ventanas veíamos los árboles, pero no había ninguno lo suficiente cerca para agarrarse o descender por una rama. Tampoco había ya escaleras y la altura desde la segunda planta era considerable. No podíamos bajar.



- Que no cunda el pánico. - Dijo Alberto.
- ¿Que pánico…?. - Pregunto su primo Javier.
- Yo estoy tranquilo. - Dije yo.
- Aquí parece que vive alguien.  - Dijo Alberto.
- Si mirar ahí hay cosas. . - Dijo Javier.
- ¿Que hay? - Pregunte yo.
- Parece ropa y mira un espejo. - Dijo alberto.
- Eh mira esto son cintas de música. - Dije yo.
- Ponla. - Dijo Javier.
- Aquí pone The doors.  - Dije yo a la vez que daba al play.


Entonces empezó la música en la fábrica abandonada y subí el volumen mientras pegábamos bailábamos y reíamos. Alberto encontró unas gafas de sol y yo una gorra nike pero de repente javier dijo. - Pueden volver - y entonces nos quedamos mirando mientras la música sonaba y alberto apago el casette. - Tenemos que irnos de aquí – Dijo en alto y empezamos a buscar alguna forma de bajar de la planta superior.


- Saltar es imposible. - Dije yo.
- ¿No veis una cuerda o un hierro largo para poder colgarnos y descender?. - Pregunté.
- Mirad. - Dijo Javier a la vez que nos acercábamos a una ventana.
- Parece un desagüe del tejado. - Dijo alberto.
- La tubería parece que está bién. - Dije yo.
- ¿Tú creés que aguantará…?. - Pregunto Javier.
- ¿Quién primero….?. - Pregunté yo.
- A la de una a la de dos a la de  tres !.
- Te toca alejandro. - Grito alberto además eres el más pequeño.
- Si, tenemos que ver si aguanta. - Contesto javier.


Me descolgué de la ventana y puse el pie sobre un anclaje de la tubería, y parecía que resistía todo mi peso así que solté la primera mano y agarré con fuerza la tubería. Apenas se movía y tampoco eran tantos metros de caída. Una vez agarrada con la mano la tubería y con el pie apoyado más abajo en el anclaje a la pared conseguí arrastrar la segunda mano por el borde de la ventana lo suficiente para terminar de descolgarme y empezar a deslizarme hacia abajo por la tubería. Al final volví a pisar la yerba y dije – Buff me he salvado - . Después se deslizo Javier y después Alberto. Nos quedamos detrás de un árbol muy grande y frondoso contemplando la entrada de la fábrica.



- ¿Quién creés que vivira allí?. - Pregunté.
- Algún vagabundo. - Contesto javier.
- Si claro, con un radio casette. - Dijo Alberto.
- Joder, se nos ha olvidado arriba, mierda – grite yo.
- Es verdad . - Dijo Javier.

Entonces escuchamos el sonido del motor de una moto a lo lejos y nosotros automáticamente nos escondimos entre los matorrales y los árboles cerca de la entrada a la fábrica abandonada. Al rato una moto de campo con una chico y una chica se detuvo en la puerta. El la beso al bajarse y ella le abrazó un rato mientras él le acariciaba el pelo. - Se la va a follar – susurro alberto y entonces todos empezamos a reír hasta que el chico escucho algo y miró hacia dónde estábamos justo en el momento en que yo salía corriendo y gritaba - marica el último - .




3 . Franco tiene el culo blanco.

Al recorrer las mismas calles treinta años después del final de la infancia te sorprendes al descubrir que todos nuestros juegos pertenecían a un reino pequeño que ya ha sido olvidado y que apenas cabía en algunas millas: aquél bosque y aquellos árboles que parecían oscuros gigantes, ni siquiera era un lugar tan grande y que aquellos juegos llevaban hacia el único reino, la infancia. Treinta años después podemos volver a los mismos paisajes cambiados por el paso del tiempo pero no podemos volver a aquellos juegos. Tal vez el niño es sacrificado por el cielo cuando dejamos atrás los juguetes que un día abandonamos sin saberlo. Aquél reino fue demolido: la vieja granja fue demolida, la mina abandonada tapada para siempre, sobre el campo se levantaron centros comerciales y viviendas, chalets de lujo porque cada palmo de tierra que pisábamos tenía un precio. Sin embargo era de Oro el suelo que pisábamos: el bosque al caer la tarde cuando volvíamos a casa las noches de Verano, las paredes de la mina cuando nos lanzábamos por ellas subidos en tablas de madera, los partidos de fútbol en campos olvidados, jugar a las chapas las tardes de Verano, coger renacuajos en las charcas, pisar el suelo de Oro del único reino: la infancia. Al cruzar el campo hacia la antigua vaqueria un anciano nos llamo desde lejos tocando una flauta y todos fuimos corriendo hasta él. Había visto a ancianos antes pero él parecía muy viejo, tan viejo parecía que de las orejas le fueran a crecer setas y tenía el pelo blanco y raído.




    • ¿Quién eres….?. - Pregunto otro niño.
    • Solo soy un viejo. - Contesto el anciano.
    • ¿Que haces aquí ?. - Preguntó otro niño.
    • Tomo el Sol. - Dijo el anciano.
    • ¿ Porque eres tan viejo?. - Pregunté yo.
    • Un día también serás tan viejo como yo. - Me contesto el anciano.
    • No creo. - Dije yo mientras el resto de niños reían.
Mirad – os voy cantar una canción – y empezó a hacer sonar
la flauta mientras los niños le mirábamos y al final de
la canción empezó a cantar: ¡ Franco !
¡Franco! Tiene el culo blanco porque su mujer lo
lava con airel….. Al escuchar el culo blanco todos los niños empezamos a reír.
    • ¿Quién es Franco…?. - Preguntó un niño.
    • Quien era…. - Dijo acariciándole el cabello.
    • ¿Ya esta muerto?. - Pregunté yo.
    • Si. - Dijo el anciano. - Una vez hubo una guerra – Dijo entre cortadamente
    el anciano mientras todos los niños le escuchábamos en silencio.
    • ¿Contra quién?- Pregunto otro niño.
    • Contra nadie. - Volvió a decir el anciano.
    • Una guerra se hace contra alguien – Contesto otro niño.
    • Si, fue contra alguien….fue una guerra en la que tú luchabas contra él.
    - Contesto el anciano señalando hacia mi.
   

Entonces desde la vaqueria se escucho a las vacas y todos los niños nos fuimos corriendo a ver las vacas. Desde una gran ventana mirábamos como los empleados cuidaban de las vacas y mirábamos desde lejos hasta que un empleado al vernos por la ventana cogió la manguera de agua a presión y empezó a lanzarnos chorros de agua hasta que todos los niños nos fuimos corriendo. Al mirar atrás el anciano ya no estaba y entonces Javier se acerco y me dijo – Yo lo he visto - .

    
    
    • ¿El que has visto Javier?. - Pregunto su primo Alberto.
    
    
    
    • He visto la guerra . - Contesto Javier. .
    • ¿Que guerra?. Pregunte.
    • La guerra de la que hablaba el anciano. - Volvió a decir Javier, - Está allí – dijo señalando hacia el bosque . -
    
    
    
    

Así que algunos niños empezamos a caminar guiados por Javier hacia el principio del bosque donde el cerro los gamos se hacen las cuestas mas empinadas hasta llegar a los primeros árboles del bosque. Allí caminamos entre sendas y árboles hasta una antigua edificación de cemento gris y oscura medio tapada por la vegetación y había algo en la piedra oscura y negra que daba miedo, algo antiguo que no pertenecía a la naturaleza, algo que provenía de los siglos remotos que nosotros ni siquiera podíamos calcular, algo que pertenecía a Caín.

   
     
    • ¿Qué es ?. - Pregunté yo.
    • De la guerra .. - Dijo Javier.
    • ¿Qué guerra ?. - Pregunto Alberto.
    • La que gano Franco. – Dijo Javier.
    • ¿El que tenía el culo blanco?. - Pregunto Alberto.
    • Son bunkers de guerra. - Dijo Javier.




Todos los niños nos subimos encima de los bunkers de guerra, y algunos se metieron dentro hacer que disparaban desde los nidos de ametralladora: Ta – ta – ta – ta – ta– ta . ¡ Mira Alberto como disparo! Así entre juegos pasamos la tarde hasta que al caer el Sol decidimos volver hacia casa gritando y cantando a todos los que nos cruzábamos en el camino que nos miraban aterrados al escuchar a niños cantar: ¡Franco! ¡Franco! ¡Tiene el culo blanco lavado con Ariel….! Aquel contraste , niños gritando libertad y viejos atemorizados ante la libertad total de la infancia. ¿Quién fue Franco ?. Nos preguntábamos de oídas cuando empiezas a comprender que en el colegio no hay pupitres para zurdos, porque en la dictadura no había zurdos. A mi hermano le ataban la mano izquierda en el colegio siendo un niño, a mi no yo, unos pocos años después que Franco la libertad se imponía en los colegios cuando todavía la educación era en su gran mayoría pública. Así conoces a Caín, lentamente, su huella detrás de las ideas, sus bunkers de guerra, la huella de un mundo que poco a poco se desmoronaba y se caía vencido por las décadas, sus ideas en desuso poco a poco olvidadas para siempre. Pero su huella, escondida entre la naturaleza, hecha carne y piedra, permanecía indeleble como sus bunkers de guerra, los bunkers de guerra de Caín, algo anterior a nosotros que todavía nos perseguía solo como memoria de un mundo peor , de un pasado anterior del mal que solo poco a poco y amargamente comprendimos cuando poco a poco nos hicimos mayores y la infancia se desvaneció para siempre y que había algo terrible y macabro en muchos juegos de nuestra infancia, como jugar a la guerra sobre el campo de batalla de nuestros abuelos, ya aquellas viejas banderas apenas significaban nada. Cuando me hice mayor viaje a Praga, allí me perdí y encontré edificios de viviendas parecidos a los que había conocido en España hechos por la falange y la dictadura pero allí construidos por el partido comunista. Había algo de irreal en todo aquello, tantas banderas, tantos muertos , tanto terror, y muerte para las mismas ideas contrarias que dejaban un eco vacío en las décadas, como si aquel pasado terrible fuera una equivocación y viviéramos sobre el pasado de un mundo mejor que nunca pudo ser. Así también de niño nos enseñaron tal vez sin querer a no hablar de los bunkers de la guerra, a obviarlos, a olvidarlos. Ahora me sorprenden aquellos juegos cuando alberto, yo y Javier corríamos por el bosque con nuestras armas y palos y una tarde sin querer pisar algo, escarbar en la tierra y sacar un casquillo de la tierra.




- ¿Qué es?.  -Pregunte.
- Una bala de la guerra.
- Es mía.
- A ver que pone.
- ¿Que pone ?. - Todos a la vez.
- Pirotécnicas de Sevilla, 1934.
- Es una bala nacional. - Concluyo alberto -
- ¿Quienes eran los nacionales?.
- Los de Franco. - Dijo Javier.





Entonces miramos a todas partes hasta darnos cuenta de repente que estábamos en mitad del campo de alguna batalla de la Guerra Civil Española. Comprender de repente que tu mismo de alguna forma provenías de aquella guerra , de aquél pasado peor. algo anterior a nosotros y que mirando hacia el cielo parecía también sobrepasarnos como si ese pasado peor aún persiguiera a los hombres, porque aquel pasado peor de Caín, eramos nosotros mismos hechos carne. Durante un rato nos quedamos callados perplejos alrededor de todas las ideas que podían surgir del casquillo de una bala de la guerra civil.


  
  
- ¿Quién la dispararía …?.
- Un soldado.
Miramos hacia un lado y hacia otro, y así comprendimos que aquellos bunkers
eran parte de las defensas de la ciudad y de la carretera de La Coruña. 
- ¿Mataría a alguien?.
- Seguramente si. Ó a lo mejor fue una bala perdida.
- No lo podemos saber.
- No la quiero tener – Dije yo.
- ¿Por qué?.
- A lo mejor  mato  a alguien. - Volví a contestar.
- Yo me la quedo.  - Dijo Alberto.
- Es mejor que no nos la quedemos nadie. - Dijo Javier.
- Es mejor. - Dije yo.
- Tírala – alberto - , tírala.



Alberto lanzó la bala lejos, muy lejos, y desapareció para siempre. Si aquella bala había matado , o quién la disparó es algo que no podíamos saber. Allí sentados entre los árboles, allí perdidos jugando entre elfos imaginarios que provenían de las tardes aburridas leyendo lecturas de libros infantiles , apenas éramos unos niños intentando comprender un mundo que nos era ajeno y que solo percibíamos a través de señales.

4 Ese niño te mira raro

Un día sin previo aviso, el campo de futbol y las canastas construidas con hierros de viejas farolas en mitad de un descampado para que los niños jugasen al fútbol fue atravesado por máquinas escavadoras. El mundo había sido sesgado y nuestra infancia partida. Aquella carretera que iban a construir rodeaba toda la ciudad de Madrid y un día llegó hasta nuestra barriada y aquél bosque fue cercado entre autopistas. Grandes máquinas atravesaron el monte del campo como si nuestra infancia solo hubiera sido la cuadrícula pequeña de algún mapa gigante. Sin embargo la infancia prevalece y continúo sobre la propia autopista. Un día llegaron noticias de que un niño había muerto aplastado por una de las grandes tuberías de drenaje y alcantarillado de la autopista que los niños hacían rodar ladera abajo y durante un tiempo nos estuvo prohibido acercarnos a la autopista. Las grandes máquinas oradaban la tierra entre semana y aquel fue nuestro jueguete favorito aquél verano. Incluso hubiéramos arrancado las máquinas si las llaves hubieran estado allí. Para entrar teníamos que saltar la vaya o buscar algún agujero , luego una vez dentro paseábamos sobre la construcción de la autopista y los fines de semana hacíamos escursiones por las tardes antes de que cayera el Sol porque incluso nuestra infancia había quedado dividida y al otro lado de la carretera estaba la casa - arbol en mitad del bosque. Así desapareció aquel lugar abandonado dónde habíamos jugado a finales de los 80`s.



    • ¿Qué creés que pasará…?. - Pregunte.
    • ¿Cuando?. - Dijo alberto.
    • Cuando seamos mayores. - Conteste.
    • Nunca seremos mayores – Dijo javier.

La vieja priégola todaviá no había sido derribada pero ya habían abandonado los pisos de la vaqueria. Una tarde pegue una patada a una puerta y esta cedió. Al cruzar el umbral de la puerta primero uno , despues otro, con nuestros palos y piedras, como si fuéramos un ejército invencible. Fuimos descubriendo y conquistando cada piso , planta por planta, escalera a escalera de un lugar abandonado. En el último piso nos quedamos a mirar por la terraza y desde allí se podía ver la carretera, y por las ventanas de la cocina al otro lado a lo lejos la ciudad. De repente se escucho un ruido y alberto empezó a reir.


    • Eh mirar chicos.

    • ¿Que pasa…?. - Gritamos a la vez javier y yo.
    • Venid he encontrado algo.

Al acercarnos a la habitación dónde estaba alberto vimos un monton de revistas porno apiladas casi doscientas desde plays boys y revistas porno mientrás nos reíamos y empezábamos a coger las revistas.


    • Bufff, que guarros. - Dije yo.
    • Si. - Contesto Javier.
    • Si mira como se la mete. - Dijo alberto.
    • Ahhhh !. - Conteste yo.
    • Mira mira mira, un poster.
    • Alah.

Y así por primera vez contemplamos la naturaleza perfecta de la mujer y el sexo. Pasamos horas entre risas y fotos de rubias desnudas, hasta que hicimos el pacto de no contarselo a nadie. Así que fue como empecé a mirar a mis vecinas. Se llamaban Patricia e irene, ya me había dado cuenta que desde la ventana de la habitación de mi hermano , se veian las habitaciones de ellas. Un día al caer la tarde me subí a un taburete, tenía 11 años. Me colgue de la ventana y empecé a mirar por ella. Patricia estaba desnuda, tenía 17 años. Se daba crema lentamente en su grandes tetas, y fue así como conocí la sexualidad. Su culo, su largas piernas, el pelo púbico… y espiarlas se convirtió en mi juego era el año 1990, los 80´s habían acabado y empezaba otra década: el muro de berlin había caido, la guerra fría parecía que había sido un mal sueño aunque nosotros poco sabíamos de o más que escuchar palabras como Chernobil en el colegio y los mayores asustados entre rumores.

5. [....]

En la larga curva que viene de la estación del Norte y Príncipe Pío un tren atropelló a una niña y murió. Allí mirábamos los viejos trenes pendulares pasar entre besos y caricias. Las estrellas brillando, la existencia es así , intermitente. También de niño jugábamos allí a poner monedas en las vías y esperar a que el tren pasara por encima. A Patrice un día casi le atropella uno tren y se le cayeron los tripies, a mi también una vez casi me atropella cruzando las vías; miras a un lado y tienes un tren encima. También murió una enfermera atropellada por el tren a principios de los 80`s en el paso a nivel. Debajo de las vías había un subterráneo y allí fumábamos los primeros cigarrillos. Teníamos 12 años, y robábamos un cigarros a nuestros padres y allí tosíamos.






    • ¿Qué es esto…?.
    • No sé porque lo hacen.
    • Fumar es una mierda. - decía mientras tosía.
    • Una día seremos mayores. - Dijo Jaime.
    • Yo no quiero ser mayor- Conteste.
    • Mi hermano es gilipollas- - Contesto Jaime.
    • El mío ve la teleserie Cristal.
    • Ja ja ja ja. - Empezó a reír Jaime.
    
    
    
    
    
    

Al salir del subterráneo que conectaba con la mina entonces las vimos. Dos chicas desnudas tomando el Sol encima del tejado de la caseta de la construcción. Primero escuchamos la música y después al subir la pendiente hacia nuestras casas y elevarnos por encima de la altura del tejado vimos sus cuerpos desnudos tomando el sol



    • ¿Por qué crees que lo hacen…?.
    • ¿El qué…?.
    • ¿Porque vienen a follar a nuestra mina.
    
    
    

Entonces empezamos a lanzar gritos y gemidos y empezamos a gritar: ¡ Follar ! ¡ Follar ! De tal forma que se repetía en las paredes de la antigua mina a cielo abierto: ¡ Follar ! ¡ Follar ! ¡Follar ! ¡ Follar !. Para luego salir corriendo de camino a nuestras casas hasta llegar a la calle angelita, la frontera. -

[...]

[...][...]

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sábado, 20 de enero de 2024




















Tengo una infusión - muy buena - de roibos y cítricos, a la que añado cascara de mandarina mientras escucho música y fumo yerba un sabado por la tarde cualquiera. Es automotivación para escribir 1989. Je je je. He pensado que en la segunda parte: Uno reiría ju ju ju, el otro ja ja ja, el otro je je je, y el otro ji ji ji. - Risotadas - tengo grandes ideas sobre la segunda parte de la novela, desde el secuestro de la estatua de un monje por un grupo de estudiantes vascos, y un personaje el perro. Para la España más vivaz y oscura de Rinconete y cortadillo, El Buscon o el Lazarillo . Si, qué grande es escribir !








jueves, 18 de enero de 2024

La novela 1989 también tiene música.




Quiero hacer una playlist que acompañe a los capítulos por orden y referencia. Como esta canción que acompaña la segunda parte de la novela. Esa España pícara, soez y maldicha.De El Buscón, de El lazarillo, de Rinconete y cortadillo. Así he ideado la forma crar un canal de youtube con una playlist titulada 1989 como B.S.O de esta novela que quiero presentar al premio Nadal o... La novela tiene dos partes diferenciadas y ahora que tengo más tiempo voy a terminarla.





"Al contemplar desde arriba podía imaginar larga hilera de viejos Olmos hasta la caída final y la vías del tren que cortan el paisaje que sigue descendiendo salpicado de casas y tejados rojos entre tilos, sauces y chopos blancos al lado de la avenida que cruza las vías. En las vías del tren ha habido muchos suicidios estudiantes y mendigos en una larga curva que proviene de la estación del Norte y Principe Pío, incluso pusieron vallas para evitar peligros y hace dos años pasado un chaval se ahorco en las vallas de seguridad. A veces llueve sin sentido. A veces íbamos a mirar la luna allí a las vías del tren, desde dónde se contemplaba la ciudad de Madrid a lo lejos : el piruli, la torre Picasso, las torres Kío desde una ventana a la ciudad que miraba hacia Aravaca, la avenida de la galaxia y su arboleda verde. Al entrar en la casa de Patrice el olor de la vieja vivienda medio abandonada me recordó a otra época dónde nosotros solo éramos niños y todo lo demás era campo. De repente al cruzar el umbral de aquella casa abandonada fue como volver a los años 80`s ; las viejas casas de este barrio estaban alquiladas a estudiantes de la universidad y había fiestas en las casas los fines de semana y se escuchaba a The Doors y Led Zepellin, los coches eran viejas furgonetas siata, cuatro latas, citroen, renault 5, los años 80`s se acababan en un lugar apartado y abandonado que no importaba a nadie a la afueras de una ciudad de Madrid. De golpe recordé nuestros viejos juegos de niños en la mina abandonada. "


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Vine a vivir a este barrio en el año 1986. Antes vivía en la gran ciudad, en el barrio de Hortaleza. Un día de golpe me vi en el campo en mitad de ningún lugar a las afueras de la ciudad. Patri nació en París pero nada más nacer vino a vivir aquí a este barrio en el año 1967. Este barrio durante la posguerra había sido el barrio del carburo, que era el gas que utilizaban en las casas apenas sin acometidas de agua, más que los pozos que abundan en cada finca o tierra. No todo era feliz en 1989, apenas un verano antes el hermano de Javier, un obrero homosexual que alicataba suelos en el barrio se suicida cansado del mundo. Un año más tarde se ahorca en su local de materiales del pueblo el tito un hombre con un brazo deformado por la polio. En 1991 Carlos un chico con problemas de salud acelera el coche y se estampa contra una esquina. A veces llueve, eso es todo. La imagen de un hombre deteniendo los tanques en la plaza de Tiananmen recorre el mundo, la gente subida al muro de Berlín cambia el universo. 1989 pasará a la historia como el año cambió todo para siempre y nunca nos enseñaron que nunca podríamos volver. Allí solo había un paisaje abandonado, bosque y monte bajo, aldeas abandonadas , hornos de cerámica abandonados, almacenes abandonados, una antigua granja abandonada, una mina a cielo abierto abandonada, un estación de tren abandonada, un campo de tiro al plato abandonado, unos bunkers de la Guerra Civil abandonados , campos de fútbol abandonados y solo campo lleno de senderos y caminos que llevaban de un lugar a otro por donde ya solo los niños pisaban las tardes de verano cuando volvíamos de recoger renacuajos en el fondo de la mina abandonada y sus hondas charcas verdes que reflejaban el cielo. Solo el bosque era en si un reino majestuoso , oscuro y verde dónde de pequeño iba a coger piñas en el campo para prender la estufa de mi casa entonces de madera. La primavera un día de Mayo de 1989 , bajo la lluvia, unas katiuskas rojas , el prado iluminado recién florido entre oscuras zarzas y cañas tiernas. La caja de los gusanos de seda que un día serán mariposas, las hojas de morera, los viejos trenes pendulares cruzando el paisaje que salían de la estación del Norte y Principe Pío, el cielo borrascoso empujado por el viento justo antes de que nada pasara. en un lugar perdido que a nadie le importaba. Tal vez las raíces de los árboles hundidas en la tierra entre los charcos una mañana de Domingo azul y clara y no poder regresar aquél reino: - la polilla, la hormiga , la tela de araña- .



1989, alejandro Rojo Cisneros






miércoles, 17 de enero de 2024





A las 3 a.m - tomo te - matcha con cúrcuma y nanranja. La gente cree que la literatura no es un trabajo. Engañados por esta estafa piramidal, incultos y movidos por las bajas pasiones: envidias , celos y mentiras que solo se creen ellos mismos. Sin embargo escribir buena literatura para presentarla a premios literaios también es un oficio , un trabajo para su desengaño. Sin embargo como - ellos - no pueden , denigran a quién si tiene talento para hacerlo , ante el vacio de sus vidas. Todavía están mirando este blog, a ver que pueden decir o dejar de decir por - sobretodo - movidos por la envidia a la que se suman las ganas de joder, mientras que yo para ganar algo de dinero no necesito trabajar en ninguna oficina, ni ningún empleo, simplemente hago diseños web para empresas y PYMES, y llevo rr.ss. Sin trabajar demasiado mientras intento especializarme dentro del campo del bug bounty y el hacking sobre aplicaciones web. Sin embargo mi meta no es esta, mi meta es presentar mis novelas a los premios literarios , un buen trabajo lo puede tener cualquiera, pero ser un escritor, un creador de historias, imáganes y metáforas como dentro de la poesía ya he logrado. Sino la pintura, que no es una carrera de éxito, sino una forma de vida. Al final el mundo pone a cada uno en su lugar... Sin demasiado odio a personajes que me dan igual, y que me importan - un pepino - prosigo con el delicado hilo narrativo mientras los demás duermen. Mi propósito es tener - 1989 - acabada antes del verano, estamos ya a mediado de Enero, cuando acabe el invierno deberé tener medio escrita la novela. Todavía septiembre. Después retomaré la escritura de - Los Alejados - . Ante esto mi libertad para escribir no pueden hacer nada. Quiero empezar a hacer deporte, pienso a las 5.10 de la mañana, salir a correr, y hacer ejercicio. Me vendrá - bien - hacerlo regularmente. ¿ De que hablo cuando hablo de correr? . Decía mUrakami , sin embargo yo voy despacito , no fuerzo mucho, y a lo sumo hago escaleras, en algún parque, para no oxidarme demasiado. Tengo 44 años, despues de dejar el tabaco, llega cortar con otras cosas... en estos propositos retrasados de año nuevo. 2024 me cae bién por ahora...









domingo, 14 de enero de 2024

Tambor - corazón.






MIs viejos amigos también lloran. Yo medio conozco a un Barroso, como Miguel Barroso, Un familair suyo fue quién escribió ¿Hormigas en la boca?. De oídas se que también hay un alejandro barroso, tiene mala reputación el chico aunque la calaña de la gente que le pone a parir, tampoco es muy recomendable. Sin embargo si he escuchado hablar y mucho de esta familia que hoy llora. No sé muy bién quienes son, sin embargo ayer de madrugada salto la noticia. Infarto de corazón. Lo lei en El país, también leí sobre cristina rosenbinge y safo. Los viejos amigos también lloran los días amarillos, cuando el mundo es como una mañana de pájaros como dice el escritor David torres sobre una de sus novelas favoritas. A mi leer me da placer, soy lector. Leeré Hormigas en la boca, pero me parece que va sobre CUba, a mi me interesa mucho Cuba, debo tener familia allá. El tambor - corazón también se para. Por eso hay que correr en pos de quien deseamos -necesitamos. En mi caso ¿michelle?. En todo caso es la - conexión - Cubana la que explica de donde provengo. Espero no volver a verles nunca. El mundo es como un mañana de pájaros... dice David Torres.
















jueves, 11 de enero de 2024

Galicia Canibal.

Soy trisexual, y mi corazón está con mi hermanos - gais - . Ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja ja. En fin. Viva la fiesta, fachas. ...