miércoles, 8 de mayo de 2024

Adiós - pequeña - Venezuela.






A veces también - se llora - escuchando radio 3. Así ha sido esta tarde mientras la música se escuchaba. Uno de los tipos con los que he estado conviviendo y bailando en fiestas locas, se muere. No hay remedio. Hasta aquí he llegado, ha dicho cuando nos ha llamado. Fumándose un cigarro a las puertas del hospital dónde la han comunicado que la metastasis se ha extendido por todo el cuerpo . Apenas le quedan unos meses de vida, de ahí provenían los dolores, siempre quejicoso, antes de esto, puedo decir que viví locamente los últimos meses antes de ser internado en el hospital, ahroa le dan morfina, ya no necesita nuestras pocas drogas. Ahora más que nunca necesito tiempo para acabar mi novela. Ya todo ha cambiado, una era se acaba. Al fondo se ve el verano, y así voy a pasar los días, escribiendo literatura entre sonrisa y lágrimas. Patrice , mi viejo Orwell ya ha visto a muchos irse, marcharse de este mundo , a algunos con pena y lástima: " Da igual, dice... Solo se puede decir, hasta pronto. La ensoñación de este pisto patera de Españoles, esta vagabundia y nuestras bromas como - pequeña venezuela - , hispanibundia o como quieras llamarlo, ya nunca será igual. Ahora si que quiero terminar la novela, pienso mientras escucho el fútbol por la radio y describo la situación en la que se encuentra mi novela, partida en pequeños archivos de texto, por capítulos, deshilachada. Allí narro un mundo que fué, o que se está hiendo para siempre. Desde algún punto de vista, desde alguna estrella lejana, ya estamos todos muertos. Nuestro cuerpo esta muerto desde siempre pero no lo sabemos. Así de transitorio es todo, tambíén cuando llega el gran apagaón y te duermen con morfina. Un día - él - se cabreó conmigo , porque no había escrito la novela, me dijo, esto me dijiste el otro año, yo me excuse y le conteste escribir algo que verdaderamente merezca ser leído es muy difícil y yo necesito solo tiempo. Ya escribo con premura. y me descuelgo entre los renglones. Me ha gustado, al menos también bailo con mi música - inventada - como dj venido a esta distopía. Los niños también lloran con 44 años, lloramos también como niños. A pesar de todo, creo que estos golpes me están centrando, literatura, hacking, y música los días de fiesta.









No hay comentarios:

Publicar un comentario

España es un país que adolece de - babosismo - y de babosos. De gente falsa e idiota, a los que no hacemos mucho caso , y les ...